¡Ya podemos dar por inaugurado el verano! Es una época de
mucho calor, por lo que alimentarse correctamente es fundamental. Los consejos
son los mismos que el resto del año. La diferencia es que preferimos tomar
platos fríos. Considero que es el momento ideal para empezar a cuidarse.
En primer lugar, vamos con las indicaciones más importantes
junto a opciones para que os resulte más fácil.
La base deben ser las verduras y hortalizas. Existe vida más
allá que una ensalada (mirad la infografía que hizo mi compañera
Griselda Herrero). También se pueden elaborar sopas frías como gazpacho, de
melón, de aguacate, vichissoise, etc. Podéis echar un vistazo a las propuestasde Juan Llorca que son vistosas y apetecibles.
Las proteínas deben representar una cuarta parte del plato.
No solo es carne, pescado y huevo. Las legumbres son una fuente de alta
calidad. Procura evitar los embutidos ya
que son ricos en grasas y sal. Además, el consumo excesivo está relacionado con
la aparición de determinadas enfermedades como el cáncer.
El cuarto de plato que falta son los cereales. Y no me
refiero a los de desayuno. Disponemos de una amplia oferta como el arroz, la
pasta (puede ser de trigo, arroz, espelta, centeno, kamut, etc), la patata, el
bulgur, la sémola, la quinoa, la avena y otros muchos más. Se pueden poner en
la ensalada o acompañando a los alimentos proteicos.
¿Y el postre? La mejor opción es una fruta fresca. Si es de
temporada, muchísimo mejor. Ahora se pueden encontrar cerezas, albaricoques,
melocotones, nectarinas, fresas, melón y sandía. Seguramente, algún día
preferiréis un helado. Lo que ocurre es que los comerciales son una fuente
enorme de azúcares y grasas. ¿Sabéis cual es la mejor manera de que sean
saludables? Hacerlos en casa. Tan solo hemos de coger la fruta que más nos
guste, trocearla y congelarla. Y disponer de una batidora potente, si es de
jarra muchísimo mejor. Se tritura y añaden toppings como cacao o frutos secos. A
continuación, os pongo algún ejemplo. Y si no, Sílvia Romero y LucíaMartínez escribieron un post.
- Helado de plátano: solo, como base junto a otras frutas como fresas, arándanos, moras, grosellas o con cacao en polvo y nueces. Se caracteriza por ser cremoso.
- Helado de frutos rojos: moras, arándanos, grosellas y/o frambuesas.
- Granizado de sandía o melón.
Puede utilizarse bebida vegetal, leche o yogur para dar
cremosidad si no nos gusta la textura al triturar solo la fruta. Además, se pueden decorar con frutos secos.
Y para beber agua, y si no un refresco casero con agua y
trozos de fruta (frescas o congeladas como si fueran cubitos) acompañadas de
hierbas aromáticas. Es una iniciativa de Laura Saavedra y Vicky Fagúndez.
¡A disfrutar!
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