Se han terminado las fiestas
navideñas y como cada 31 de diciembre, nos proponemos una serie de objetivos
para el nuevo año que empezamos. De forma general, acostumbran a ser siempre
los mismos: dejar de fumar, apuntarse al gimnasio, etc.
Seguramente hayas hecho más de
una comida en familia y te hayas atiborrado a cantidades enormes de turrones y
polvorones, por no decir el número de copas por brindis. Calorías vacías, al
fin y al cabo. Y también suelen ir acompañados de varios platos, normalmente
ricos en grasas y proteínas. Vamos que apenas se asomaba una fruta u hortaliza
(las verduras también se incluyen). Y puede resultar que además no hayáis
realizado casi ejercicio, sobre todo si no lo tenéis planificado en vuestro día
a día. Por todos estos motivos, es probable que hayáis cogido unos cuantos kilos. Y es ahora en
enero se os ocurre perderlo y si puede ser de la forma más rápida posible. Pero
ya os digo yo que no es tan fácil.